El gobernador Gustavo Valdés presentó en Casa de Gobierno un ambicioso plan de financiamiento destinado a revolucionar la industria de la carne en Corrientes. La iniciativa contempla la asistencia a frigoríficos de gestión pública y privada para modernizar sus plantas de faena y adecuarlas a las nuevas normativas sanitarias nacionales.

Durante el acto, Valdés remarcó que “tenemos que revolucionar la industria de la carne en Corrientes”, subrayando que el objetivo es avanzar hacia una ganadería más eficiente, con mejoras genéticas y mayor capacidad de producción. “Somos terceros en producción ganadera y uno de los primeros en genética”, recordó.

La nueva línea de financiamiento, canalizada a través del Fondo de Desarrollo Industrial (FODIN), incluye subsidios de tasas de interés y aportes no reembolsables (ANR). En esta primera etapa, se destinan $5.200 millones para fortalecer al sector, que emplea actualmente a más de 200 trabajadores en frigoríficos correntinos.

Los establecimientos beneficiados se encuentran distribuidos entre los municipios de Goya, Ituzaingó, Berón de Astrada, Sauce, Caá Catí, La Cruz y Bella Vista, además de las plantas privadas La Brava (Capital), El Ombú (Paso de los Libres) y Búfalos del Iberá (Ituzaingó).

El financiamiento apunta a mejorar las condiciones de faena, incorporar buenas prácticas de manufactura, garantizar el bienestar animal y cumplir con los procedimientos operativos estandarizados de sanidad. Todo esto con la intención de abastecer el mercado interno con productos cárnicos seguros, de calidad y con valor agregado.

Una industria con visión de futuro

El ministro de Producción, Claudio Anselmo, detalló que Corrientes cuenta con 32 plantas de faena en actividad, muchas de las cuales necesitan adecuarse a las nuevas exigencias del SENASA. “La transición del sistema de media res al troceado y envasado exige inversiones importantes y un rediseño integral del modelo de faena”, explicó.

Por su parte, la ministra de Industria, Mariel Gabur, consideró que la medida busca «industrializar nuestra materia prima» y destacó el rol de la Provincia en apuntalar a un sector estratégico con líneas de crédito específicas para su crecimiento.

Valdés también señaló la necesidad de trabajar junto al sector privado. “Necesitamos que el privado invierta, que tenga la tecnología, que genere empleo. Y el Estado tiene que hacer el esfuerzo para que eso sea posible”, sostuvo.

El plan prevé, además, continuar con el desarrollo del Plan Pasturas y fomentar la producción local de maíz para abastecer feedlots, con el fin de consolidar una cadena de valor integrada y sustentable desde el origen.

Ituzaingó, modelo de transformación

El intendente de Ituzaingó, Juan Pablo Valdés, celebró la llegada de inversiones para modernizar el matadero municipal y posicionar al municipio como un polo de desarrollo cárnico regional. La obra permitirá incorporar la faena de ganado bubalino, un sector en auge en el norte correntino.

“Hoy comienza una nueva etapa”, afirmó. “Apuntamos a industrializar la carne no solo para abastecer al mercado local, sino también para procesarla, envasarla y exportarla con valor agregado”, explicó en diálogo con Radio Punto de Referencia.

Valdés subrayó que el desafío principal es cumplir con las exigencias sanitarias en la etapa primaria, lo que abrirá las puertas para avanzar con la fase 2 de la cadena: trozado, envasado al vacío y comercialización. “Es ahí donde realmente se genera trabajo”, aseguró.

Además, lamentó que hasta ahora no se hayan logrado atraer inversiones privadas: “El privado va a venir cuando vea que la planta está en condiciones de producir con calidad. Por eso esta decisión del Gobierno provincial es clave”.

En el acto de presentación también se entregaron las carpetas técnicas a los responsables de los frigoríficos involucrados en el plan. Participaron ministros provinciales, legisladores e intendentes, entre ellos el propio Juan Pablo Valdés, quien expresó: “Tenemos que transformar la industria para generar empleo y desarrollo”.

Corrientes inicia así un camino de modernización en su industria cárnica, con foco en la calidad, la trazabilidad y la apertura de mercados. Una apuesta a largo plazo que combina inversión pública, fortalecimiento de capacidades locales y el compromiso de abrirle paso a la inversión privada.