A medida que se acerca el final de la cosecha de girasol 2024/25, la Bolsa de Cereales de Buenos Aires volvió a elevar su proyección de producción en 200.000 toneladas. De este modo, el volumen estimado asciende a 4,7 millones de toneladas, el registro más alto en los últimos 25 años.

Según el Panorama Agrícola Semanal (PAS), el avance de la recolección alcanza el 96,3% de la superficie implantada. La oleaginosa cubre 2,05 millones de hectáreas en todo el país, y los mayores ajustes de rendimiento se observaron en el centro-norte de Santa Fe y el norte de la zona Núcleo.

La nueva proyección implica un incremento del 30% respecto de la campaña anterior, cuando se obtuvieron 3,9 millones de toneladas. Se trata de un repunte significativo que consolida al girasol como uno de los grandes protagonistas de la temporada agrícola actual.

Resultados que superan las expectativas

El informe destaca que el rinde promedio nacional se ubica en 23,5 quintales por hectárea, con picos de productividad en zonas como el norte de La Pampa, el oeste bonaerense y el norte de la región Núcleo, donde se registran valores superiores a los 28 quintales por hectárea.

Esta tendencia positiva ya se venía observando semanas atrás, cuando la Secretaría de Agricultura estimó una cosecha de 4,9 millones de toneladas gracias a un aumento de superficie sembrada, que pasó de 1,9 a 2,2 millones de hectáreas respecto de la campaña pasada.

Aunque el volumen actual es récord para las últimas décadas, los años de mayor esplendor del girasol se registraron en los 90. En la campaña 1998/99, por ejemplo, la producción alcanzó los 7,1 millones de toneladas con una siembra de 4,2 millones de hectáreas.

Finalmente, desde la Bolsa porteña remarcaron que los buenos resultados se deben a rindes de lote que en varias regiones superaron los promedios históricos de los últimos 5 y 10 años, en particular en el sur de Córdoba, San Luis y el sur del área agrícola, donde aún queda un 30% del área por recolectar.